Comin' in hot

Voy a empezar a lloriquear, que sé que os encanta...

sábado, 10 de diciembre de 2011

¿What's up?

Se acercó. De su rostro emanaba un extraño calor, y sus pupilas no eran más que simples agujeros que se apagaban poco a poco, desilusión tras desilusión. Y me sonrió. Entonces sentí que era fuerte. Sentí eso que sienten los flojos de conciencia y duros de espíritu. Bombeaba sangre, que circulaba veloz, como si de una autopista arterial se tratara. Mi gesto se colapsaba, exhausto de buscar una forma adecuada que me hiciera parecer alguien, quizás por el alcohol consumido o por lo que llevaba esperando ese momento.
Bajo la consigna de "devuélveme lo que me pertenece" entablamos conversación. Y hablamos horas, y horas, y horas... repasamos todos y cada uno los sentimientos que habían azotado nuestro sistema nervioso en los últimos años. Mi pulgar y mi índice derechos luchaban a brazo partido con la superficie de su piel. Quería adentrarme en todas y cada una de sus capas. Quería que su intensa agonía se disfrazara en algo más que una realidad difusa....

No es fácil describir una situación así. Solo sé que en aquel momento había dos personas allí, el resto habían desaparecido por completo, se habían desintegrado para introducirnos en una intimidad imaginaria...pero nos bastaba.

Acerqué su rostro al mío, tratando de plasmar gráficamente la sensación de imán que sacudía mi cráneo. Y entonces se paró el tiempo...

Lo siguiente que recuerdo es salir de ese lugar con la sensación de que era el sueño de mi vida, no me preguntéis por qué...Tenía la extraña idea de viajar a otro planeta, a un rincón aparte en el que mandamos yo y... ella. La verdad es que dijo algo...algo que me tocó la fibra sensible de mi mente..

- ¿Qué fue?

No hay nada que te asegure, a día de hoy, que esto irá bien. Pero te aseguro que lo único que quiero ahora mismo es ser culpable de que todo empiece a ir mal.




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